Reseña: Fantasmas, espectros y otros trapos sucios

Título: Fantasmas, espectros y otros trapos sucios
Autor: Jaime Alfonso Sandoval

Libro: Autoconclusivo

Páginas: 204

Género: Misterio/Suspenso/Humor/Aventura/Infantil

Editorial: Barco de Vapor (SM)

Calificación: 4.5 Estrellas

SINOPSIS

Tito tal vez es un niño muy típico de su edad, ya que a sus 11 años no le gusta bañarse ni arreglar su cuarto ni hacer sus deberes. Un día en su casa, en el cuarto menos atendido y gustado por la familia, decide ir a visitar a alguien que no es del todo muy agradable, por lo menos para los adultos: el tío Chema. 

Y es que según ha escuchado, suele ser problemático a la hora de atenderlo.
Un día, por no tener para contratar a alguien, entre miembros de la familia se turnaron para cuidarlo y no pasaban más de 10 minutos cuando ya iban de regreso porque no podían soportarlo más.

A pesar de esto, Tito fue a visitarlo con cierto recelo. Se armó de valor a sabiendas de que algo pueda pasar; subió escaleras y abrió la puerta... pero, un momento, ¿qué le pasa al tío?, es que no se entiende lo que dice.

De alguna manera Tito logra comunicarse con él, después de varios intentos.
¡Pero vaya! ¿qué es eso?, su tío le dice que eso era un Guaje, pero es extraño... porque se escucha algo adentro y como que se mueve... ¿los guajes se mueven?

Este es sólo el inicio de muchas y muy interesantes historias que, muy a su manera, el tío Chema le platica a Tito, guardando un mensaje en cada una de ellas; por otro lado, el cuarto está tan desordenado que no se distingue el orden de cada objeto que ahí habita, pero quizá todos tengan su historia.

MI OPINIÓN

¿¡Qué tal amigos lectores, cómo les va!?

Vuelvo a mis orígenes. 
Hacía rato que no reseñaba una lectura infantil y de verdad, no es porque sea de un autor que me agrada su pluma, pero disfruté cada página del libro.

Desde el prólogo empieza la diversión, los casos insólitos que narraba el Doctor Catafalco como: el extraterrestre que se estrelló en el baile de XV años de la hija del gobernador y acabó en la cárcel de Matamoros por destruir el pastel o que se decía que los rusos tenían comunistas infiltrados hasta en la cola de las tortillas. Entre otros más que tuve que pausar mi lectura porque no paraba de reír.

Para después seguir con lo fundamental: las historias del tío Chema.
Esa manera tan emocionante de narrarlas y de engancharte me hicieron estar en la piel de Tito y bien que sabía cuándo cortarle. Cada detalle está tan cuidado que la lectura se vuelve muy amena y ese intervalo completando la historia no lo entendía hasta que al final me di cuenta que tenía un por qué y no caí en cuenta del por qué el tío le daba esas tareas a Tito y bajo qué objetivo.

Me divertí con cada historia y todas tienen su protagonista, de los cuales, a mi parecer:
La de la originaria de Rincón de Garnica, Ags., me recordó a esos vendedores de productos milagro que tienen su As bajo la manga y que nuestra intrépida heroína supo qué hacer con la ayuda de alguien que no me esperaba ese final y que demostró ser también muy audaz.

El del puerto jarocho (Veracruz) fue como esos niños que lo tienen todo, hasta que algo pasa; aún siendo muy caprichosito, el momento lo hizo despertar y me lleve una sorpresa cuando supo la realidad, que acabó con todas mis teorías. Lo que destaco de aquí es que supo adaptarse y se transformó... en varios sentidos.

Y para ir cerrando, quiero dejar muy claro que nunca hay que perder esa inocencia; me refiero a la claridad con la que vemos las cosas por más que otros nos digan que estamos alucinando y nos tachen de locos. Cuando tenemos fe en algo vemos el camino hacia el bien, más nunca falta el desorientado que nos quiere convencer de lo contrario y eso es muy lamentable.

He de destacar la actitud tan prudente que tomó Tito. Muy firme y seguro cerca del final, por todo lo que vio y el ejemplo que aprendió.

El mensaje final de este libro es que dejemos atrás las máscaras que le ponemos a la gente por los rumores que escuchamos, nos pongamos a hacer nuestra tarea y descubramos la verdad. ¿Por qué tenemos que creer más en los prejuicios que en nuestra corazonada?

Mi calificación fue así porque a pesar de ser una gran historia, siento que me faltaron algunos puntos por aclarar o que quizá no comprendí.

¡Gracias por leerme amigos, hasta la próxima!