Reseña: Gótico

 

Título: Gótico
Título original: Mexican Gothic

Autor: Silvia Moreno-García

Libro: Autoconclusivo

Páginas: 352

Género: Gótico/Novela/Terror/Fantasía

Editorial: Minotauro (Planeta)

Calificación: 4.5 Estrellas

SINOPSIS

Las fiestas en casa de los Tuñón suelen acabar tarde, en especial las de disfraces. 

Y no era de extrañarse ver llegar a chinas poblanas en compañía de arlequines y/o vaqueros. Por el amplio lapso entre el inicio y fin de las mismas, los taxistas hacían largas filas alrededor en las taquerías y otros visitaban a las criadas con quienes ya tenían un amorío.

Hubo una pareja que rompió los esquemas y salió antes de tiempo; Noemí convenció a su pareja de vestir esa cabeza de caballo de papel maché, y ella, un traje de jinete con fusta; pero le pareció muy sofisticado y optó por un largo vestido verde, bordado de flores. Tenían que robarle la noche a Laura Quezada y su prometido.

Sin embargo, una llamada de su padre cambió los planes.

Al salir, no encontraron a su chofer por ninguna parte y Noemí tuvo que llamar a un taxi. Cuando Noemí deseaba algo, lo quería ya. Y aquellos días había deseado a Hugo (que tenía un aire de Pedro Infante), aunque ahora que tenía su atención era probable que lo abandonara.

Al llegar a su casa y despedirse de un muy ávido Hugo, fue a la oficina de su padre. Decorada de un arte moderno que reflejaba el nuevo poder adquisitivo, fruto de un modesto negocio de colorantes químicos, que a priori, le daría una fortuna; Noemí no se molestó en tocar la puerta, estaba muy molesta con la interrupción con su ligue de la noche.

Aunque su padre sabía que Hugo no era más que un arquitecto recién graduado, le pidió que tuviera miras más altas. Su padre suele ser muy exigente con ella, tanto en lo personal y más en lo laboral. No obstante, lo que esa noche iba a decirle, no podía contárselo ni a su madre, ni a su hermano, ni a ninguno de sus amigos: hace unas semanas recibió una carta de su prima Catalina.

Hacía unas afirmaciones de lo más escandalosas sobre su marido. Le escribió a Virgil (su marido) para intentar llegar a la raíz del asunto; le contestó y le dijo que Catalina se estaba comportando de un modo muy extraño y ciertamente inquietante. Si ella se encontraba en ese estado, lo más conveniente sería traerla a la Ciudad de México; la respuesta fue que no sería necesario.

Virgil contestó por telegrama, el cuál Noemí leía atentamente.

Iba dirigida a ella y la invitaban a ir a visitar a Catalina. Su papá le dijo que le gustaría que fuera. Virgil dice que Catalina ha preguntado por ella. Catalina envió una carta de lo más extraña. Afirmaba que su marido la estaba envenenando, e incluso decía tener visiones.

Hacía meses, o tal vez un año, que vio por última vez a su prima.

Se fueron de luna de miel a Pachuca, pero luego de eso tuvieron poca comunicación. Todos habían supuesto que Catalina disfrutaba de aquella nueva época de recién casada. Pero la carta de Catalina era muy rara, porque ella suele ser muy clara en sus escritos.

...la rapidez del compromiso de Catalina había rayado en lo escandaloso...

…nadie de la familia conoce a Virgil, ese era el problema: era un extraño...

Noemí se fue en el primer tren del lunes.

Durante el viaje, le mandarán un Telegrama a Virgil para que sepa que está de camino. Noemí debe tener discreción e inteligencia.

El Triunfo se encontraba en la ladera de una empinada montaña de flores silvestres; cuanto más ascendía el tren y más se acercaban, más cambiaba el paisaje, no aparecía en ninguna guía de viajes. Tenía el aire enrarecido de un lugar que se echó a perder. Había pocas señales de actividad en el pueblo.

No se parecía en nada al lugar encantador en el que Catalina dijo que iba a vivir.

MI OPINIÓN

¡Bienvenidos a su blog, queridos amigos!

Desde que me enteré que este libro fue un best-seller en EEUU, sólo sabía que iba a llegar mi momento de leerlo; no me presioné y solito llegó. 

¡Y fue en el mejor momento!

Fue mi primer lectura de terror gótico y nunca, pero nunca, le había tirado tanto hate a un personaje literario, de verdad.

Desde el inicio, cuando supe que la historia se localizaba en los años 50 y hablaron de Pedro Infante, supe que me iba a gustar, y que la protagonista fuera mexicana, más. Y como lo dije en la sinopsis, Noemí Taboada es una chica de familia acaudalada que esa noche estaba en una más de sus conquistas y tratando de opacar a Laurita Quezada, yo pensé: un romance dramático a mediados de siglo... y no; al rededor de la página 50 la historia cambia.

Noemí es una mujer fuerte, que ha vivido las ideas típicas de la época: la mujer si se queda en casa ayuda más, que si se pone a estudiar. Ideas de este tipo me causaron conflicto, ya que los comentarios no sólo venían de su familia: al llegar a High Place, (la mansión donde vive Catalina y su marido Virgil), al ser completamente ambientada al estilo inglés, nadie dentro de la casa hablaba español (a excepción de Francis) y tenía horarios muy estrictos, una disciplina interna celosamente resguardada y... un clasismo y racismo pobremente disimulados. Ahí tuve otro ataque de enojo y respiré... pero volví a mi lectura.

Debido a la libertad de pensamiento que tenía para la época, Noemí fue blanco de criticas, discriminaciones e indirectas muy directas. Fue como si todos confabularan en su contra para hacerla sentir que no pertenecía ahí y que no debía estar ahí. Empero, me revitalizaba ver cómo se rehusaba a sentirse menos, era muy inteligente y sabía elegir las palabras adecuadas evidenciando su experiencia en casos similares con amigos de su papá o cuando se veía obligada a ceder para generar un vínculo mas cercano en beneficio de sus consanguíneos. Pese a que técnicamente estaba "en familia", no lograba sentirse así por lo ya mencionado.

Y esto se pone en su mejor momento al rededor de la página 200.

Cuando se propone algo, lo logra por cualquier medio; pero ojo, no nos confundamos.

Se ve forzada a salir de su zona de confort; podría decirse que vive una especie de reality donde, para no revelar mucho, debe abandonar todas las estrategias que hasta ahora conoce y bajarse de su pedestal, para obtener un apoyo externo. Dicho apoyo es de vital importancia para el lector, porque el chisme la información aquí obtenida nos devela lo que jamás vamos a oír en voz del antagonista. Al principio pensé que era pura charlatanería, pero el tiempo lo resuelve todo.

Virgil es un hombre centrado.

No puede ver nada fuera de su lugar, especialmente al ser educado por Florence que más que haberlo salvado, para mí, lo llevó a la perdición. Es muy astuto, y su ingenio es estimulado por esa exuberante musa que lo lleva a desconocer el pudor y los principios y todo lo que lo detenga de satisfacer sus fervores juveniles. Las primeras veces que pasaba no lo comprendía, pero luego de escuchar ciertos secretos de él, comprendí su sometimiento emocional.

Sobre Florence, sólo sentí desprecio.

En ningún momento sentí que esa mujer pudiera tener algo de amor, ni para ella misma ni para nadie más. Sólo cumpliendo las órdenes de Virgil y Howard, las cuales eran de su total goce. Pero cuando vio que Francis estaba cambiando porque alguien lo hizo cambiar, fue ahí donde se volvió insoportable y se alió para incrementar su desprecio al doble, al triple...

Y siempre hay una luz en la oscuridad. 

Francis sí buscó superarse, sí quería cambiar, tenía mucho sigilo, fiel y sincero, pero era muy ingenuo. Muy estudioso y apasionado de lo que le gusta, pero con mucha experiencia por aprender. Su nexo con Noemí fue lo que me mantuvo esperanzado en toda la trama. Fue como esa zona de seguridad donde tenía que volver cuando veía todo oscuro. Puedo decir que fue por Francis que Noemí tuvo los pies en la tierra, se olvidó de sus excesos, de que no se sintiera aceptada y la apoyó tanto que allí mismo renacía otra Noemí.

Para ir cerrando, mi calificación fue así porque la autora logra meterte en un mundo donde aunque te sientes incómodo, no lo sueltas hasta que no acabas el capítulo. Es un terror tan exquisito que hace gala de la gran creatividad de la autora, aunque reconozco que llegué a tener sueños como los descritos; específicamente hay un capítulo entero dedicado a un sueño lúcido-traumático que hizo de mi fin de semana, algo -literal- alucinante.

¡Muchas gracias por leerme, nos vemos en la próxima!